Los pisos de vinilo, aunque son bastante fáciles de mantener y limpiar, son propensos a los arañazos. Pequeños trozos de grava o guijarros rastreados desde el exterior marcan la superficie del vinilo. Las áreas dañadas acumulan suciedad, haciéndolas más visibles. En particular, en las láminas de vinilo, sacar una baldosa mala y reemplazarla por una nueva no es una opción. En lugar de dejar que los rasguños menores se vuelvan más oscuros o más obvios. repararlos con un sellador líquido transparente para juntas.
Paso 1
Abra todas las ventanas de la habitación y encienda un ventilador de techo, si hay uno, para ventilar el área.
Paso 2
Aplique un poco de diluyente de laca sobre un trapo suave con guantes de goma. Limpie a fondo el área dañada con el diluyente de laca para limpiarlo y elimine los residuos que puedan evitar que el sellador de la costura se adhiera correctamente. Permita que el área se seque por completo.
Paso 3
Coloque tiras de cinta de enmascarar cerca del rasguño para evitar que el sellador de costura vaya más allá de donde sea necesario.
Paso 4
Vierta parte del sellador líquido para juntas en el frasco aplicador empaquetado, si aún no está en dicho frasco. Aplique una pequeña gota de sellador de costura sobre el rasguño y deje que se seque por completo.
Paso 5
Retire la cinta adhesiva.