El hormigón es uno de los materiales de construcción más comunes en lo que respecta a las aceras. Pero, como sustancia industrial puramente funcional, el concreto es frío y sin vida. Evite las aceras tristes agregando carburo de silicio reluciente a la superficie del cemento recién vertido. Ya sea del sol, la luna o una farola cercana, las motas cristalinas de carburo de silicio captarán la luz y deslumbrarán a todos los que pisen su camino.
Paso 1
Calcule la cantidad necesaria de carburo de silicio. Adquirir 25 a 50 libras. por 100 pies cuadrados, dependiendo de cuánto brillo se desee.
Paso 2
Enrasar el cemento recién vertido arrastrando una tabla a través de la parte superior de la acera. Permita que el cemento se endurezca ligeramente, luego alíselo patinando un flotador de toro hacia adelante y hacia atrás sobre la superficie.
Paso 3
Permita que el cemento se endurezca aún más, hasta que pueda soportar algo de presión pero aún sea impresionable.
Paso 4
Espolvorea el carburo de silicio de manera uniforme sobre la superficie del cemento.
Paso 5
Incruste las partículas en el cemento trabajando con un flotador manual a través y alrededor de la superficie, aplicando presión media a firme.
Paso 6
Añade cualquier textura deseada. Borde, cure y selle el concreto como de costumbre.