En principio, se pueden usar muchos tipos diferentes de bombas para bombear agua. El tipo más común, sin embargo, es la bomba centrífuga. Una bomba centrífuga funciona con un dispositivo llamado impulsor. El impulsor es un poco como una turbina. Tiene muchas cuchillas curvas, que canalizan el agua a través de la bomba.
La bomba centrífuga
Cómo funciona el impulsor
El impulsor gira muy rápido. Las palas curvas canalizan el agua hacia el ojo, o el centro del impulsor, pero esa agua fluye hacia el exterior de las palas. Debido a que el impulsor se mueve rápido, la fuerza centrífuga comprime el agua contra el exterior de la pala. Esta presión hace que el agua se dispare hacia adelante en un chorro de alta velocidad fuera del impulsor. Esta velocidad crea presión en el lado de salida de la bomba, empujando el agua a través de la tubería.
El motor
Las bombas de agua eléctricas más pequeñas, como las que se usan en los hogares, generalmente tienen pequeños motores de CC. El motor de CC está contenido en una caja sellada unida al impulsor y lo alimenta a través de un simple engranaje. En el centro del motor hay un rotor con bobinas a su alrededor. Alrededor de esas bobinas hay imanes, que crean un campo magnético permanente que fluye a través del rotor. Cuando el motor se enciende, la electricidad atraviesa las bobinas, produciendo un campo magnético que repele los imanes alrededor del rotor, haciendo que el rotor gire 180 grados. Cuando el rotor gira, la dirección de la electricidad en las bobinas cambia, empujando el rotor nuevamente y haciendo que gire el resto del camino. A través de una serie de empujes, el rotor continúa girando, impulsando el impulsor y alimentando la bomba.
